viernes, 26 de septiembre de 2008

Los niños Índigo

Resulta que ayer, cuando salimos de clase Sandra y yo, nos fuimos a sentar tranquilamente en un banco de la city, para hablar un ratillo, que la primera semana de clases ha sido (al menos para mí) un tanto estresante y bastante chocante, es todo taaan avanzado!!*
*Nota: todas mis asignaturas de este curso se apellidan "avanzada" : Química Orgánica Avanzada, Q.Inorgánica Avanazada, Q.F.Avanazada...

Bueno, pues nos disponíamos a pillar el primer gran capazo de la temporada cuando nos asalta un cuarentón en bici, delgadísimo y calvo como una bola de billar.
-¿He hablado antes con vosotras?
Nosotras: cara de ¿?
-Vale, veo por vuestras caras que no he hablado nunca antes con vosotras. Bueno, pues venía a deciros que vivimos en un paraíso, pero nuestros defectos (que tenemos muchos) no nos dejan disfrutarlo como debemos, y nuestro egoísmo, avaricia, apego a lo material...
Así siguió durante un buen rato, hablándonos de las fuerzas positivas y negativas del universo, de la bondad y de lo que atraemos a nuestra vida...
Luego se pasó a un rollo más astrológico, nos dió unas fotocopias con las virtudes y defectos de nuestro signo del zodíaco y nuestro ascendente -resulta que soy acuario con ascendente cáncer, ¡yo que siempre había creído que era tauro!- y cuentecillo por detrás.

La verdad es que el tío estaba un pelín pa´allá, con sus historias de predicciones mayas y nuestros hermanos mayores (los extraterrestres) que van a venir a realizar una "limpieza" de almas de un momento a otro -la fecha barajada es el 2012- pero no le faltaba razón al afirmar que recogemos lo que sembramos y que estamos demasiado preocupados por todas las necesidades materiales que nos creamos, en vez de focalizar hacia nuestro interior y descubrir las cosas que realmente pueden hacernos felices, no durante unos minutos, sino a lo largo de toda nuestra vida.
Vamos, al menos es lo que creo que me puede quedar como enseñanza de ese monólogo que mantuvo con nosotras (que no nos dejó abrir la boca más que para 2 palabras).

Bueno, que me enrollo como las persianas!!
Resumen, hay que ser positivo!!! Y no hay que dejar que nos digan de qué color hay que ver nuestra vida... y que quien siembra vientos recoge tempestades, así que mejor sembrar sonrisas, no?

besos!!

1 comentario:

Anónimo dijo...

He visto en este antiguo texto tuyo las palabras "niños índigo" y me he detenido. Aunque no veo exactamente que hablara el hombrito este de niños índigo, lo he buscado en google y me he enterado: Resumen:

"Hay que ser positivo"
En ello estamos algunos, también cuarentones y delgadísimos (para calvo de superficie brillante falta menos). Lo que pasa es que cuesta. Y la verdad, ya que no me atreví a comentarlo en su otro texto "Respect", se agradece una mano amiga cuando uno cae, no creo que las haya caídas meritorias de ayuda y otras que por definición sean para mirar a otro lado. Eso define un poco el tamaño del corazón, incompatible muchas veces con el tamaño de la inteligencia, del dinero en el banco, del qué dirán, del número de carreras que terminaste etc.

Lo siento. Acabo de terminar mi desahogo y ya empiezo a arrepentirme. Si es que no puedo. Da igual. Hasta el final con lo dicho.