jueves, 25 de octubre de 2007

A los pequeñajos del cole...

Tengo que dedicar una entrada a los niños tan majos que tengo de alumnos en el colegio.

Es cierto que, a ratos, me estresan, me enfado y les castigo, les confisco cromos y juguetes, les mando copiar frases...
Pero son muchos también los momentitos de regusto dulce que dejan a lo largo de la semana.
Por ejemplo cuando te están esperando en la puerta del patio, o se quedan a la salida despidiéndote con la mano,cuando te enseñan con orgullo (aunque tú pienses Oh dios mío!!!)el último chichón que se han hecho, cuando alguno te da un abrazo espontáneo o te regala una sonrisa iluminada al decirle que te encanta la cara del caracol que te han dibujado... y la carita de bobos que ponen cuando les lees un cuento y la cosa se pone interesante...

Y es que es muy importante no olvidar que un niño es la cosa más íntegra, más sincera y tierna que puede existir en el mundo.

Absorben todo lo que se les dice como esponjas y, aunque a veces puede parecer un incordio tomarles de la mano y enseñarles a hacer las cosas poquito a poquito, aunque haya que repetírselo algunas veces más, es bien cierto que cuando lo aprenden ya no lo olvidan y uno se siente reconfortado en su interior al saber que le enseñó algo lo mejor que supo a esa diminuta persona.

Tengo un recuerdo muy bonito de una profesora que me dio clase cuando yo tenía 5 años, a todo el mundo le daba un poquito de miedo, porque era bastante mayor y muy seria.
Pues bien, esa gran mujer me enseñó a leer, y recuerdo perfectamente el día que vino a clase y nos dijo que nos iba a enseñar las letras... qué ilusión me hizo.

Eso mismo es lo que espero yo -salvando las distancias entre aquélla maestra y yo, que soy una "aficionada"-, dejar una huella, por pequeñita que sea, en mis alumnos, que alguno al cabo de los años me recuerde como la que le enseñó, con toda la paciencia y el cariño que pudo a dibujar... a crear.

Un beso a todos mis niños, por mis clases ya han pasado más de doscientos... ¿cuántos se acordarán de mí?

Buenas noches.


Cuídense.

No hay comentarios: