viernes, 13 de marzo de 2009

Ley del Aborto

Transcribo literalmente, una carta al director publicada ayer, jueves 12 de marzo de 2009 en el diario gratuito ADN:

ABORTAR CON 16 AÑOS
Abortar con 16 años se ve como un logro, un derecho. Estoy de acuerdo en que hay que regular la situación, no podemos olvidar que una niña con 16 años depende para todo de su familia.
No es lógico que asuma la responsabilidad de tener un hijo si no está preparada.
Sin embargo, la solución no debería ser ya abortar, sino evitar que se quede embarazada.
Es aquí donde veo el reto de los padres, educadores y político: conseguir que los adolescentes aprovechen el tiempo que les queda de infancia para disfrutar esa etapa como niños/jóvenes.
Quizá deberíamos estudiar cómo educarles en libertad, pero con responsabilidad, ya que en su vida les tocará afrontar que cada acto tiene sus consecuencias. Y para eso más que que aprobar leyes de póntelo-pónselo, o educación sexual, deberíamos ofrecerles alternativas más interesantes para el tiempo libre que tienen.
Rosabella Aparece
Montgat (Barcelona)
A raíz de la lectura de esta carta, me surgen varios pensamientos:
1) Yo a una muchacha de 16 años no la calificaría como "niña", para mí es una adolescente e, incluso en determinados casos, una joven, dependiendo de la madurez que demuestre.
2) La actual ley de regulación del aborto es exactamente del año en que nací, 1985.
Hay leyes más antiguas en perfecto estado de aplicación, pero probablemente, no de carácter social. Los jóvenes/adolescentes de hoy día comparten poco con los de hace 25 años, por no hablar de lo que podían tener en común una chica de 16 años en 1985 y una de 1960. Así que considero que las leyes deben adaptarse a las demandas de la sociedad para las que se aplican, no a las demandas de una sociedad que ya no existe.
3) Completamente de acuerdo en el punto de que no es lógico que asuma la responsabilidad de tener un hijo si no está preparada. Pero puntualizo: no es lo mismo dar a luz un hijo que criarlo.
No sé a qué se refiere con "tener" en este caso.
Si es una mujer en el sentido fisiológico de la palabra, está preparada para engendrar, gestar y dar a luz una criatura.
Y aún es más:
Como cualquier animal llegado al desarrollo completo físico, siente la sexualidad y experimenta atracción sexual hacia sus semejantes.
Los seres humanos tenemos superada la fase del "celo" y no nos mueven fines única y exclusivamente reproductivos. Y bien sabe cualquiera con dos dedos de frente y un mínimo de cultura que esto es debido a razones evolutivas. Gracias a dios no tenemos ganas de relacionarnos sexualmente sólo en un mes determinado del año.
Y el meollo de la cuestión es éste:
¿en qué momento dejamos de estar preparados para asumir la responsabilidad de criar un hijo si somos perfectamente capaces de engendrarlo?
Hace aproximadamente 100 años (alguno más, pero no voy a ponerme a calcular fechas exactas) mi bisabuela, que tenía 20 años y hacía 3 que estaba casada, lloraba porque no tenía hijos.
Después tuvo 11.
Ahora mismo, en ESTA sociedad, bien pocas chicas de 17 años encuentras casadas y menos aún, jóvenes de 20 que lloren por no haber tenido ningún hijo.
¿qué pasa, que somos menos maduros ahora? ¿estamos menos capacitados a estas edades para tener un hijo? Va a resultar que cuanto mayor es el nivel de educación y de cultura menos capaces somos de "tener" un hijo.
Tenía una amiga que a los 17 años quiso ser madre. No fue un desliz, fue una decisión. Poca gente confió en ella, nadie daba un duro porque esa "locura" saliera adelante pero ahí está; después de 9 años, sigue con su pareja, además del niño tuvieron otra niña y, con sus dificultades pero han sacado adelante la familia.
A mí me sorprendía que los demás se sorprendieran de su decisión.
En fin, que me voy por las ramas.
No puedo estar de acuerdo con esta señora en que los adolescentes tengan que aprovechar el tiempo de infancia que les queda.
No empeñamos en que los niños maduren antes de tiempo: apenas juegan, y si lo hacen no es con otros niños sino con ordenadores.
Les enseñamos a ser competitivos, a no dejar "pisotearse" por los demás, a quere ser los mejores y a tener sentimientos de culpabilidad si fracasan.
Dejamos que los eduque la televisión a la hora de comer, a la hora de merendar, a la hora de cenar.
Les damos pocas responsabilidades y lo peor de todo: no les enseñamos a ser responsables, a entender lo que significa y preferimos hacer las cosas por ellos porque lo hacemos más rápido, porque es muy molesto enseñar con paciencia.
Luego, cuando llegan a la pubertad, nos asustamos del cambio repentino y pretendemos que "disfruten de la infancia un poco más".
Error, la infancia ya pasó.
Así que nuestros adolescentes llegan a los 15, a los 16 años siendo unos completos inútiles.
Ojo, afortunadamente no todos, existen excepciones y me hace feliz conocer personalmente a unas cuantas.
Y entonces es cuando vienen los problemas.
Los niños son niños, no tontos. Cada edad tiene la capacidad de entender y asimilar determinadas cosas, pero creo que desde bien pequeños, con cariño y con palabras sencillas pueden entender la sexualidad y cómo se hacen los bebés.
Estoy completamente a favor de las campañas de sensibilización, del "pónselo-póntelo" y de la educación sexual. Creo que la asignatura de Educación para la ciudadanía debería hacer hincapié en este tema (me parece que se cursa en 5º de primaria -alumnos de 10-11 años, completamente preadolescentes y a punto de ser hormonas con patas- y en un curso de la ESO); ignoro si lo hace porque no he revisado textos, pero estoy casi segura que no se han planteado que la prevención de embarazos no deseados debería empezar antes de que sean capaces de quedarse embarazados, luego pasa como en Reino Unido, que un pichabrava de 12 años deja preñada a una chavala de 14 ó 15 y todos nos llevamos las manos a la cabeza.
Considero que la educación es fundamental a la hora de solucionar el incremento de embarazos no deseados.
También que si una joven de 16 años tiene capacidad para decidir en su parto si quiere la epidural o no sin consntimiento paterno, debería ser capaz de decidir si seguir adelante con un embarazo o no.
Y sobre todo creo que tienen derecho a que les dejemos madurar.
Y nosotros tenemos la obligación de enseñarles a ser responsables de sus actos, y dejar que sean libres.

3 comentarios:

enoldor dijo...

Poco más que añadir, es dificil de todas maneras que los niños de ahora salgan medianamente responsables si es la sociedad entera la que les esta enseñando a no serlo.

El camino es duro, pero ciertamente muy satisfactorio.

Un saludo:

- Adrián -

cristal00k dijo...

La madurez no es una linea recta que se cruza un día o a una edad determinada. Es una decisión personal que a unos les llega antes que a otros, dependiendo de las hormonas, que no sólo maduran fisicamente, también lo hacen a nivel cerebral y emocional. Y dentro de ella, todos somos producto de una época y una educación irremediablemente...
En todo caso, tener la libertad de decidir sobre el propio cuerpo, aún con 16 años, me parece más un acierto que un error. Pero cada caso es un mundo aparte y diferente de cualquier otro.
No se consigue la confianza de un adolescente, de pronto un día, debe haber un seguimiento previo y continuo que permita la información adecuada a cada momento.
Quiero decir, que no hay una edad para explicar, lo que sea respecto al sexo, el momento es cuando preguntan... si han llegado hasta ahi y formulan la pregunta, es el momento de contestar y con la verdad, por más comprometida que nos parezca la respuesta...
No basta con la información, se necesita sobre todo mucha dedicación y dosis extra de persuasión, porque si no se les convence, no conseguiremos nothing de nothing...
Pero cada uno lo ve a su manera. Coo todo.
Un abrazo Irene.

Anónimo dijo...

hola, de donde sos??? escribes cosas muy interesantes!!!!! no hare comentarios solo decirte que me gusto ller tu blog, un abrazo, y aver si me dices en que ciudad estas si se puede... yo estyo en Madrid...